El cáncer de mama en tiempos de pandemia

De acuerdo a la Revista chilena de Obstetricia y Ginecología, la pandemia por COVID-19 ha generado un estancamiento mundial en la atención y resolución de todas las patologías graves y crónicas, debido al colapso de los sistemas de salud durante el 2020.

Actualmente, la emergencia sanitaria a nivel mundial ha afectado muchos aspectos de la vida y salud de los usuarios, incluyendo los estudios de detección, diagnóstico, tratamiento y/o cuidados complementarios de patologías importantes como el Cáncer. En Chile, según estudio observados por el “Proyecto COV-IMPACT-C” en conjunto con la entidad emisora de bonos electrónicos y prestadores de salud privados bajo de la red IMED. Concluyen que los exámenes preventivos contra enfermedades oncológicas disminuyeron drásticamente con la llegada del coronavirus.

En el caso del cáncer de mama, como la primera causa de muerte por cáncer en mujeres chilenas y población mundial, de acuerdo a la Revista chilena de Obstetricia y Ginecología “la pandemia por COVID-19 ha generado un estancamiento mundial en la atención y resolución de todas las patologías graves y crónicas, debido al colapso de los sistemas de salud durante el 2020” . Hoy en día en contexto de pandemia, muchos enfermos oncológicos han visto postergadas sus atenciones con el fin que los recintos hospitalarios puedan mantener la continuidad de atención, sobre todo en comunas con una alta tasa de infección por SARS-CoV-2.

En este contexto y desde el inicio de la pandemia, sólo en exámenes de mamografías se estima que disminuyeron hasta un 60,5% semanalmente en promedio durante el año 2020 comparado con el mismo periodo del año 2018 y 2019. Una de las razones ya conocidas de no asistir al sistema de salud, es principalmente por miedo al contagio del coronavirus. Mientras que el caso de las ecotomografías mamarias, como otro método de tamizaje y diagnóstico para el cáncer de mama, particularmente en el caso de mujeres jóvenes, mostraron una caída del 54,6% semanal promedio entre marzo y agosto de 2020, comparado con igual periodo en 2018 y 2019.


Variante Delta

MAMOGRAFIA

La prueba de tamizaje más utilizada para la detección precoz del cáncer de mama es la mamografía, tanto para mujeres sin síntomas o signos aparentes, como para aquellas que presentan abultamientos, retracción de la piel o pezón, secreción del pezón o hundimiento del mismo. Se trata de una técnica que, mediante una mínima dosis de radiación, se adquieren imágenes del interior de la mama. Es tan eficaz que puede mostrar cambios en la mama mucho antes de que el médico o la paciente lo noten.

Prevención del cáncer

Asimismo, las sociedades chilenas de Mastología y Radiología sugieren realizar una mamografía anual a contar de los 40 años en mujeres con riesgo promedio. Por otro lado, si existe alto riesgo de cáncer de mama por antecedentes familiares de cáncer de mama, ovario o tiroides, o la paciente ha recibido un tratamiento con radiación anteriormente, es recomendable que comience a realizarse las mamografías anuales a una edad más temprana, por lo general alrededor de los 30-35 años. Sin embargo, esto es algo que deben decidir con el profesional ginecólogo/a o matron/a.

El mejor momento para hacerse una mamografía es una semana después de haber tenido el periodo menstrual. De esta forma se evitan los días en los que las mamas están más sensibles. También es importante llevar las pruebas realizadas en años anteriores, para que el Radiólogo y/o Tecnólogo Médico pueda comparar si la mama ha experimentado alguna variación.

La paciente no debe aplicar talco, desodorante ni crema en la zona mamaria y axilar, ya que algunos de los componentes de estos productos podrían simular lesiones inexistentes en la mama.

Durante el procedimiento, el Tecnólogo Médico coloca la mama en el equipo y la comprime de manera gradual. De esta forma se consigue que todos los tejidos se dispersen, para que no quede ninguna zona oculta. Además, el hecho de que la mama permanezca firme e inmóvil hace que la imagen se vea más nítida.

Los datos son muy positivos. Las mamografías evitan en gran medida los fallecimientos por cáncer de mama, ya que permiten al médico ver pequeños tumores y establecer un tratamiento eficaz. No obstante, hay que saber que no todos los cánceres de mama se ven en una mamografía.

Para tener en cuenta sobre esta enfermedad que afecta principalmente a mujeres, a continuación se destacan los siguientes factores de riesgo del cáncer mamario:

  • Ser mujer
  • Sedentarismo
  • Obesidad
  • Tabaquismo
  • Antecedentes familiares de Cáncer Mamario
  • Ser portadora de una mutación genética en los genes BRCA1 Y BRCA2
  • Nulípara
  • Edad avanzada
  • Edad avanzada del primer parto, lactancia
  • Menopausia tardía (después de 55 años)
  • Terapia de reemplazo hormonal prolongado
  • Uso excesivo de anticonceptivos orales
  • CÁNCER DE MAMA EN HOMBRES: MENOS FRECUENTE, PERO IGUAL DE AGRESIVO

    Sin restar la importancia del cáncer de mama en hombres, y a pesar que es una patología asociada principalmente a la mujer, lo cierto es que esta enfermedad también afecta afecta a parte de la población masculina, aunque en ellos se presenta a la edad promedio de 67 años, cinco años más tarde que en ellas. Al igual que en las mujeres, una de las principales causas de la enfermedad está relacionada a las mutaciones de genes supresores de tumores BRCA1 o BRCA2. siendo más frecuente la del BRCA2.

    La enfermedad suele detectarse cuando el tumor ya es evidente, a veces, puede salir líquido del pezón o este puede retraerse, tener una úlcera o doler. Además, un signo clásico es la ginecomastia (crecimiento en tamaño de la mama).

    El diagnóstico se hace generalmente por sospecha clínica, es decir, cuando se detecta un tumor detrás de la areola, y por exámenes imagenológicos: mamografía y ecografía mamaria.

    LA IMPORTANCIA DE LA AUTOEXPLORACIÓN

    Estas dos pruebas son fundamentales a la hora de una detección precoz, pero también es muy importante que las mujeres sepan autoexplorarse. Cada mes es importante mirarse en el espejo unos minutos y comprobar si las mamas han cambiado de tamaño, forma o color o si presentan algún tipo de deformidad. Hay que hacerlo con los brazos en reposo y también con ellos levantados. Se debe palpar cada mama con la mano contraria y extendida y con las yemas de los dedos (índice, medio y anular) de una forma firme y suave. El movimiento debe ser pequeño y circular. Asimismo, hay que hacerlo de arriba abajo y de izquierda a derecha, desde la clavícula hasta el surco mamario y desde la axila al escote. Puedes realizar la exploración sentada o de pie. Si al hacerse la autoexploración nota algo diferente en sus mamas, no espere y pida hora con ginecólogo o matron para que estudie su caso en profundidad.

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    Diferencias entre mamografía y ecografía mamaria

    Si deseas conocer más sobre las diferencias que existen entre una mamografía y una ecotomografía mamaria te invitamos a visitar el siguiente artículo.


    Alanis Castillo, TM CIMEK

    La ecografía mamaria se trata de una prueba indolora, y permite el estudio diferencial de nódulos o tumores que puede palpar el ginecólogo en la exploración clínica o que se visualizan en la mamografía.

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